MAMOPLASTIA
Aumento, reducción o reafirmación
La mamoplastia es un término general que abarca un conjunto de cirugías dirigidas a reducir, aumentar, reafirmar o reconstruir los senos.
La mamoplastia de aumento implica normalmente la colocación de implantes mamarios, aunque existen técnicas de transferencia de grasa a las mamas, La mamoplastia reductiva permite disminuir el volumen, pero también mejorar la forma, la mastopexia se enfoca en la reafirmación y reposicionamiento de los tejidos. Las mamoplastias reconstructivas se realizan cuando se han perdido parcial o totalmente los senos generalmente post mastectomía en el tratamiento de cáncer o cuando es necesario corregir secuelas de cirugías complicadas.
MAMOPLASTIA DE AUMENTO: (Implantes Mamarios)
Se realiza con el fin de aumentar el volumen, incrementar proyección y mejorar la forma de los senos, mediante la colocación de prótesis o implantes mamarios generalmente detrás del musculo pectoral mayor.
Las vías de abordaje más frecuentes son la areolar, submamaria y axilar. Aunque también pueden colocarse por el ombligo o desde el abdomen durante una dermolipectomia. Es la cirugía estética más solicitada y realizada a nivel mundial ya que causa gran satisfacción y mejora notablemente la autoestima femenina.
El tipo de mamoplastia depende de las características de los senos de la paciente, fundamentalmente del grado de ptosis (caída del seno). La incisión normalmente es pequeña por el borde de la areola o el surco submamario. En senos caídos se requiere reafirmar (mastopexia) en cuyo caso la herida puede ser un círculo, una vertical, una jota, o una T invertida.
Las candidatas ideales son mujeres con poco o ningún desarrollo mamario, asimetrías importantes, peso adecuado a su estatura y disconfort debido a su aspecto. También pueden ser operadas pacientes con mama tuberosa (deformidad tubular) o aquellas cuyos senos han descendido por el embarazo o cambios de significativos de peso, sin embargo, mujeres con mamas grandes deberían someterse antes a una reducción mamaria para lograr el objetivo esperado.
Existe gran variedad de implantes mamarios cuyas características determinaran el aspecto final de la mama, esta gama abarca desde prótesis pequeñas (200 a 300cc) con características anatómicas hasta implantes redondos de perfiles extraaltos y grandes volúmenes (800 a 1000cc). Las tendencias recientes apuntan al uso de volúmenes moderados que brinden un aspecto proporcionado y natural. Las marcas mas reconocidas son: Polytech, Allergan (Natrelle-CUI), Sebbin, Motiva, Eurosilicone, Johnson&Jonhson (MENTOR-McGHAN), Silimed, Nagor y Perthese. Las prótesis modernas están compuestas de un elastómero de dimetilpolisiloxano en forma de gel sólido (altamente cohesivos o “gummy bear implants“), su duración podría superar los 30 años y poseen garantías de 10 años y más.
La mayor parte de las pacientes se recuperan en una semana como para realizar trabajo de oficina o actividades universitarias, pueden tener dolor muscular durante 3 a 4 días. Los primeros puntos se retiran a los 10 días y a diferencia de lo que muchos piensan, si pueden viajar en avión al terminar sus controles postoperatorios.
MASTOPEXIA (Reafirmación Mamaria o Levantamiento)
Tiene como finalidad levantar y reposicionar los senos caídos a consecuencia de la edad, embarazos, lactancia o cambios drásticos de peso.
Las pexias mamarias tienen en común el desplazamiento hacia arriba de areolas y pezones, eliminación del excedente de piel, corrección de asimetrías y reducción discreta de los senos. Para realizarlas hay que hacer una incisión alrededor de la areola y otra por debajo del seno en forma de “J“ o “T“, la longitud de la herida depende del grado de ptosis (caída).
Son candidatas a esta cirugía aquellas mujeres con o sin hijos que presenten descenso antiestético de sus senos, deformidad o asimetrías mamarias, secuelas de intervenciones anteriores, pérdida de peso por cirugía bariátrica, cambios postparto e incluso pacientes con implantes cuyos senos descendieron.
Se trata de una buena opción para aquellas que deseen suspender sus senos conservando el aspecto natural o como un primer tiempo para corregir asimetría y descenso antes de colocarse unos implantes mamarios.
El postoperatorio no es doloroso, pero si requiere cuidados. Las pacientes deben evitar levantar peso y no manejar durante el primer mes. Pueden realizar un trabajo de oficina 10 a 12 días después de operadas y podrían viajar al cumplir un mes. No se pierde la capacidad de amamantar.
MAMOPLASTIA REDUCTIVA (Reducción de Senos)
Permite disminuir el tamaño de los senos y corregir su caída. La hipertrofia mamaria (tamaño y peso excesivo de las mamas) puede ocurrir desde la pubertad (gigantomastia juvenil) y convertirse en un dramático problema tanto o más traumatizante que la falta de desarrollo de la glándula mamaria. Además del asunto estético, las pacientes sufren fuertes dolores de nuca y espalda, dificultades para ejercitarse y hasta problemas de pareja.
Existen diversas técnicas de mamoplastia reductiva, las cuales permiten retirar hasta más del 50% del tejido mamario. En la mayoría la incisión tiene forma de “J“ o “T“ en la parte baja del seno. Si bien estas cicatrices son evidentes, las pacientes quedan bastante agradecidas al quitárseles los síntomas con una mejoría evidente de su calidad de vida.
Toda mujer con síntomas derivados del volumen exagerado de sus senos es candidata a este procedimiento, sin embargo, las pacientes deben estar muy claras en sus expectativas ya que el resultado estético nunca será como el de unos implantes mamarios. No recomiendo hacer esta cirugía en simultáneo con la colocación de prótesis de mama ya que no sería efectiva la reducción.
El postoperatorio no es doloroso, pero si requiere cuidados. Las pacientes deben evitar levantar peso y no manejar durante el primer mes. Pueden realizar un trabajo de oficina 10 a 12 días después de operadas y podrían viajar al cumplir un mes. No se pierde la capacidad de amamantar, aunque disminuye la producción de leche. Puede alterarse la sensibilidad de los pezones.